-PQÑ♥

Como me gustaria poder estar alli contigo ahora mismo. Como me gustaria pasear por la calle agarrada a ti. Como me gustaria sonreirte con la sonrisa mas tonta cuando me dices algo bonito. Como me gustaria respirar tu aliento cada vez que quiera. Como me gustaria poder decirte que dentro de cinco minutos te veia en el parque. Poder oler a ti cuando llego a mi casa despues de pasar toda la tarde contigo. Que hicieras que cada dia me gustara mas tu sonrisa. Como me gustaria poder abrazarte y que me susurraras al oido que me quieres como a nadie. Pasar horas y horas mirandonos sin decir nada, entendiendonos solo con los ojos. Jugar a ser pequeña contigo. Que me protejas estando conmigo todo el tiempo. Mirar la luna cada noche e inventar un beso nuevo cada dia.
Pequeño, me haces tanta falta como el respirar. Que te quiero como un bebe a su piruleta. Me encanta oir tu voz, me tranquiliza saber que al otro lado del telefono hay otra persona que sonrie cuando le digo que le quiero. Cada dia me sorprendes mas, con pequeños detalles me haces ser muy grande. Y si estubiera ahora a tu lado, verias como celebraria yo este dia tan importante. Solos tu y yo, sin necesidad ni del sol ni de nadie. Tu mirada y la mia. Siempre respirando tu aliento.
Que te quiero, que te quiero y que nunca me cansare de decirtelo. Te quiero muchisimo pequeño.

No quiero un chico normal, no pido un prototipo, no prefiero los rubios. Quiero un niño que no me asegure el futuro, que cada día lo viva como el primero, que no se valla la ilusión como cuando un niño pequeño se queda sin reyes..no quiero un capricho. Quiero que me recuerde cuando huela mi perfume, que para él sea única, que pase lo suficiente de mi. No quiero regalos, quiero detalles. Que cada vez que me duerma mi cama huela a Él. No busco a un chico perfecto ni que me soporte siempre. Quiero noches locas, dias en los que escaparnos los dos solos sin preocuparnos de lo que sucederá. Quiero aventura, pasión. No me gusta la rutina, no me gusta dar explicaciones. Quiero vivir en un sueño, nuestro sueño. Quiero saber que lo tengo ahí en los momentos difíciles. Que solo me diga te quiero cuando lo sienta. Quiero un niño que le guste la fiesta, pero que le haga falta estar conmigo. Quiero no sentirme segura, quiero tirarme a la piscina sin hacer planes. Me gustan los consejos pero no que decidan lo que debo hacer. No siempre lo bueno es lo mejor. No siempre se odia lo malo. Las reglas estan para saltarselas, no siempre se hace lo correcto, ¿y qué? si no, la vida sería muy aburrida. Una simple rutina, sin locura. No quiero que renuncie a los amigos por mi, ni que sea su prioridad.Quiero tener algo por lo que luchar, algo por lo que alegrarme, algo por lo que llorar, una escusa para hincharme a galletas y helados. En definitiva, no busco lo que verdaderamente me haga feliz, no quiero llegar a la meta, no busco el final, no pienso en el mañana, más cerca está la noche.

Todos hacemos lo mismo, inconscientemente. No tenemos derecho a decir que vivimos porque no lo hacemos. Nos mantenemos en pie porque constantemente estamos pendientes de nuestros deseos, “vivimos” a base de ilusiones, de recuerdos, y cuando algo nos hace ver más allá de nuestro mundo de yupi, nos caemos, y aprendemos a hacer las cosas correctamente y aprender de ese error y nos levantamos. Así funcionamos, vagabundos de la vida sin hacer uso de ella.

Estamos en un momento a nivel social en el que es importante "pasar al ataque". Yo sé que el mundo en general es una mierda pero que el mundo sea una mierda no significa que tengas que resignarte y vivir en la mierda y tirarte en el sofá diciendo: "todo es una mierda", Yo creo que es importante llevar a la gente la idea de que la única opción posible para que eso deje, para que todo deje de ser una mierda es que tú te muevas, que tú hagas, que tú te creas capaz de cambiar lo que te rodea. Y luchar y defender por lo que quieres.

-Cambios, ciclos.

Las cosas cambian. Los ciclos se cierran. Termina, Simplemente hay cosas que se van. Se van y punto. Y ya no están. Y no hay más. Todo lo que parecía ser antes ahora ya no es y mañana igual es menos. Pero, aunque las cosas cambien, a mi me sigue gustando el helado de chocolate. Me sigo poniendo nerviosa cuando veo a ese chico por el que me muero hace años. Sigo yendo al mismo sitio todos los viernes. Sigo teniendo esas cosas. Esas que me encantan. Las que me vuelven loca. Aunque puede que ahora me gusten más todavía. Me encantan tus sonrisas. Y me encantan los domingos por la tarde. La lluvia. El olor a café y tostadas. Alcanzar los trenes que se escapan. Me encanta estar enamorada. Y, pese a que ya no me pase horas delante de la televisión sigo siendo la misma que era. Con algún fracaso encima. Pero la misma. La misma que no piensa echar de menos a esa gente. Esa de lo que parecía y no es.

Y me gustaría que las cosas fueran de otra manera. Que lloviera solo cuando a mi me apeteciera. Y poder hacer que salga el sol cuando lo desee. Poder acariciar tu piel. Sentir el sabor de tus besos. Que me mires y me digas que estás loco por mi. Me gustaría estar por encima del cielo. Solos tú y yo. Siempre. Me gustaría sentir el calor de tus abrazos. Me gustaría sentirte a mi lado. Pase lo que pase. Me gustaría que estuviéramos juntos cada segundo. Pero, sobre todo, me gustaría que, después de tener un mal día me dijeras que me quieres, que no dejaras de decirlo jamás. Te quiero te quiero te quiero te quiero y te quiero. No se te ocurra olvidarlo, aunque solo sean dos simples palabras.

-Pequeño.

Ven, sientate a mi lado, abrazame, besame, dime que me quieres, que la olvidaste, que me quieres a mi. Tu felicidad es mi felicidad, para siempre es mucho tiempo, y quiero vivirlo contigo. Dime que solo vivo yo en tu corazón. Callame con un beso, callame con un abrazo; agarrame por la cintura, por los hombros pero no me sueltes nunca, agarra mi mano y no la sueltes jamás. Cogeme en tus brazos, sientame en tus piernas, métete conmigo, hazme reir, mirame con esos ojos que me hipnotizan, dime ese hola que hace que me derrita, sonrieme con esa sonrisa que solo tú tienes, quiereme como solo tú sabes querer y puedes querer. Hazme sentir única, feliz, hazme sentir que vuelo, hazme sentir especial, como solo tú me podrías hacer feliz.

En este momento hay seis mil cuatrocientos setenta millones, ochocientos dieciocho mil, seiscientos setenta y un habitantes en el mundo. Algunos huyen asustados. Otros vuelven a casa. Algunos cuentan mentiras para poder sobrevivir. Otros se enfrentan a la verdad. Algunos son hombres malos en guerra contra el bien. Y algunos son buenos, y luchan contra el mal. Seis mil millones de personas en el mundo. Seis mil millones de almas. Y a veces… solo necesitas a una.

Cuando nada te sale bien y tienes ganas de llorar, tirar todo lo vivido por la borda y desaparecer. En esos momentos te tienes que levantar, ser valiente y saber que no vale la pena esconder tu sonrisa por tonterias o gente sin importancia. Salta, rie, baila, SONRIE, y si lloras hazlo de risa.

Es el momento de gritar que eres feliz, de tirar los miedos por el balcón y sacar los malos recuerdos a la calle para que este jodido frío invernal los congele. Es el momento de plantarle cara a los problemas, de cometer errores, de tropezar, caerte y comerte el suelo. El momento de mirar a todos aquellos que hicieron que la vida fuese más puta de lo que es en realidad y dedicarles la mejor de tus sonrisas. De mirar al frente pero sin que te importe una puta mierda tu futuro, que tan solo te importe el aquí y el ahora que al fin y al cabo de esta vida no vas a salir vivo. El momento de hacer locuras, de saltarse las reglas, de acelerar y cuando vayas a doscientos por hora frenar en seco para disfrutar el paisaje. Es momento de decirle al mundo que no le temes, que has vuelto para quedarte, que esta vez no te vas a largar. Es el momento para declararte, para robarle un beso, para que te rompan el corazón, para romperlo tú, el momento de llorarle a Cupido o simplemente mandarle a tomar por culo. Es el momento idóneo, el perfecto, el mejor momento que puedes elegir para enseñar tu sonrisa más perfecta al mundo, para dar a conocer tus malditos cambios de humor, para que vean lo bipolar que eres, para que sepan lo que significa de verdad esa jodida locura tuya que te hace tan especial. Es el momento, el momento perfecto para ser tú.